sábado, 1 de diciembre de 2012

016. Toxina Botulínica



Clostridium botulinum un bacilo Gram positiva anaerobia que es productora de la toxina botulínica.
El botulismo Puede aparecer en cualquier alimento de origen animal o vegetal, principalmente en las conservas, sobre todo las caseras en las que no se llevan a cabo medidas de esterilización como en las industriales.  
La Clostridium botulinum produce unas toxinas que tienen capacidad para producir parálisis muscular por denervación química se aprovecha para usarla como medicamento en el tratamiento de ciertas enfermedades neurológicas y como producto cosmético para tratamiento estético de las arrugas faciales.
La toxina botulínica es una proteína, que está compuesta por una cadena pesada (cadena H ) y una ligera (cadena L ) unidas por un puente disulfuro. El peso molecular de la toxina pura es de unos 150.000 daltons (según el tipo) pero en forma natural está ligada a proteínas (que la protegen por ejemplo de la acción de los jugos gástricos) formando complejos de 900 o más Kdaltons.

El efecto de la toxina botulínica tiene lugar en la unión neuromuscular. En esta región se produce la liberación de acetilcolina, un neurotransmisor necesario para producir la contracción muscular. La toxina botulínica bloquea la liberación de acetilcolina, lo que se traduce en parálisis muscular temporal. El efecto final es una denervación química temporal en la unión neuromuscular sin producir ninguna lesión física en las estructuras nerviosas.

En neurología es donde  la toxina botulínica aporta mayores beneficios terapéuticos. Su uso más frecuente se ciñe a enfermedades caracterizadas por movimientos involuntarios, como en el caso de las distonías focales, que afectan un solo musculo o grupo muscular. También se usa la toxina botulínica para tratar la incontinencia urinaria en los parapléjicos. Cada vez se desarrollan más aplicaciones clínicas de la toxina botulínica, como en la hiperhidrosis (sudoración excesiva) y la sialorrea (excesiva formación de saliva).
 
Como ya se ha comentado anteriormente uno de sus usos más populares es en el famoso Botox, como tratamiento cosmético antiarrugas.

3 comentarios:

  1. Respuestas
    1. No estoy del todo segura, pero creo que cada infiltración está alrededor de los 300 euros. Varía mucho en función de la zona y la clínica en la que se realice el procedimiento.

      Un saludo

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  2. Informacion muy completa de la toxina. Gracias

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